Los detalles que enamoran de OCA Hotels

Hemos querido echarle un poquito de azúcar al 14 de febrero. Un detalle. Una píldora que le llamaba Mary Poppins… Con esta canción ha comenzado nuestra directora comercial, Goretti Iglesias esta entrevista tan personal. Y con ella queremos recordaros cuánto amamos lo que hacemos en OCA Hotels.

Si os decimos que somos algo más que hoteles es porque somos personas, sentimientos y emociones trabajando para que vosotros viváis experiencias, demostréis sentimientos y disfrutéis de emocionantes OCAsiones con nosotros.

El Día de San Valentín siempre es un buen momento para hablar de amor: por nuestro equipo, por nuestro trabajo, por celebrar en nuestros hoteles, por enamorarnos cada día de tantos y tantos detalles ¡y por vosotros nuestros huéspedes y visitantes!

¿Cómo se trabaja desde un hotel para que el cliente se enamore del servicio?

Nuestros huéspedes siempre son lo primero. Buscamos, a diario, la manera de hacerles vivir una experiencia fantástica, cuidando los detalles y poniendo todo el cariño en cada cosa que hacemos. Sin duda, éste es uno de los puntos más importantes en nuestro día a día. Constantemente trabajamos para conseguir la excelencia en nuestro servicio. Nos preocupamos porque nuestros clientes se sientan a gusto, sientan calidez y cercanía.

¿Cuáles son los detalles de OCA que más triunfan?

Desde la primera sonrisa (ahora con los ojos también sonreímos 😉 ) que recibe a su llegada, la amabilidad en el trato, un dulce de bienvenida en la habitación, una copa de cava, una carta escrita a mano, un menú especial elaborado al detalle, la amabilidad del personal que los acompaña durante su estancia… Reconocer a nuestros huéspedes, para ofrecerles esas cosas que sabemos que les gustan.

¿Cómo afrontas el nuevo reto de transmitir, a nivel comercial, lo que se hace en OCA Hotels, lo que nos hace diferentes?

Con mucho entusiasmo. Somos una gran compañía, con grandes valores. Crecemos poco a poco, seleccionando muy bien nuestro producto. Cada uno de nuestros hoteles tiene algo especial y, sobre todo, tienen alma. ¡Son nuestros compañeros los que le dan vida cada día!

Lo que marca la diferencia: es el producto tan variado que poseemos. Cada hotel es diferente en cuanto a localización, estética, oferta gastronómica, bienestar, espacios de reunión, eventos sociales… Y esto nos enriquece. Nuestros clientes siempre van encontrar la calidad en el servicio gracias a los grandes equipos que conforman nuestro hoteles.

Por otro lado, también se van a encontrar hoteles en localizaciones privilegiadas con una estética y construcción muy diferentes entre sí. Ningún hotel OCA es igual a otro.

¿Y cómo lo voy a transmitir?… Apuesto por hacerlo a través de los sentidos, de la emoción. Me confieso un ser especialmente emocional. Todo lo que rodea a las emociones cala en las personas. Por suerte, esta nueva posición, me permite disfrutar y conocer más del día a día de los hoteles de la compañía. Estoy más cerca del producto testando y difundiendo.

¿Cómo definirías el amor por lo que haces?

Me considero una persona entusiasta. Cada proyecto me llena de ilusión. Creo profundamente en el valor de los equipos, de las personas y en la importancia del respeto mutuo. No soy nada individualista. Necesito trabajar rodeada de personas, dar y recibir, aportar y absorber conocimiento para el bien común, estar unidos en las buenas y en las malas, ser solidarios entre nosotros. ¡Porque juntos siempre es mejor!

También soy de esas personas que necesitan divertirse trabajando. No importa lo fácil, difícil o duro que sea el día a día, tener un buen ambiente, reírse de uno mismo o bromear en momentos de estrés alivia tensiones. Pasamos más tiempo con los compañeros de trabajo que en nuestra casa con la familia y amigos, así que buscar que nuestro entorno laboral sea agradable es fundamental. ¡Además, y muy importante, esto se refleja y es percibido por los clientes!

Por otro lado, no pierdo de vista la importancia de saber que, solo con nuestra actitud, podemos hacer que un trabajo llegue a ser perfecto. No es el qué, es el cómo.

Mi madre a menudo dice «hay que hacer las cosas con cariño», si sabes que tienes que hacer algo que no te atrae demasiado, por muy tedioso o duro que parezca, lo mejor es que lo cojas con cariño, así se llevará mejor.

Es necesario intentar ver las cosas desde otro prisma y sacar el lado positivo, de todo se puede sacar alguna cosa positiva. Me centro en la parte buena de las cosas, más en lo que algo puede aportarme que en lo que me pueda restar. Incluso de la peor situación se puede sacar algo bueno. Reconozco que no siempre es fácil conseguir todos estos propósitos, pero tampoco dejo de intentarlo.

Hay dos premisas que siempre tengo presentes y que busco aplicar en mi día a día:

«Ir por la vida sembrando primaveras». Emilio Duró.

«Que nadie se acerque a ti sin que al marchar se sienta mejor y más feliz». Madre Teresa de Calcuta.

¿Y en el equipo de OCA Hotels, os queréis?

Sin duda. El espíritu de equipo es la base de cualquier trabajo bien hecho y eso se ve reflejado de puertas para fuera. Personalmente, siempre me encariño con las personas con las que comparto el día a día.

Me siento muy orgullosa del gran equipo que tenemos. El confinamiento y la pandemia nos han unido todavía más. Hemos sobrevivido a un gran reto, hemos aprendido y pasado obstáculos juntos. Todos hemos aportado nuestro granito de arena, para salir adelante por el bien común. Y creo que todos estamos agradecidos.

Si algo nos define es la resiliencia. Siento que hay un gran respeto y cariño que se ha visto reforzado gracias a las dificultades de los dos últimos años.

¿Qué es lo más bonito de vivir San Valentín en un hotel OCA?

Nosotros solo somos el escenario, un escenario muy bonito, pero, sin duda, lo mejor son las parejas, familias, amigos, compañeros que nos eligen y que contagian su ilusión, complicidad, risas por los hoteles.

¡El amor se manifiesta de muchas maneras, es el motor que mueve el mundo!